lunes, 27 de agosto de 2012

Quedo mirando el humo que sube desde mi taza de té… 
sabiendo que me mirás desde tu silla. Parece que te diste cuenta de mi pausa. Yo no. 
Creí que se había detenido el tiempo, pero con tu silencio me doy cuenta que la que se detuvo fui yo….
Tiesa, busco frases divertidas que haya escuchado por ahí, algo que pueda interrumpir tu aliento antes de que tenga sonido… sigo mirando la taza. 
Ya es tarde me parece, pasó mucho tiempo sin que diga nada y sería ridículo no asumirlo.
¿Pasó mucho tiempo?
No necesito mirarte para saber con qué ojos de curiosidad me estás analizando, cierro los míos y medio sonrío respondiendo a esa cara que veo sin ver.
Todos mis sentidos están en esa mano tuya casualmente apoyada en mi pierna. El resto de nosotros se esmerila en un reflejo que tiembla.